VOCES - ALM
Anoche aprovechamos la ruta de Solidarios para ver el refugio de verano en funcionamiento. Allí nos plantamos Diego, Manu, María C., Rosario, Valle, Virtu y servidor. Virtu contactó con Eva del CECOP y ésta, a su vez, nos presentó a Pepe, de la asociación APRONI (Pro Derechos del Niño) de Osuna, que ejerce como Coordinador del proyecto.
Pepe nos confirma que el recurso durará hasta finales de septiembre. En cuanto al personal que lo atiende, explicó que había "un monitor" que se turnaba con él mismo. Además, claro está, del empleado de seguridad. Nadie sabe nada acerca del comienzo de las obras en la edificación aneja.
Poco a poco, todos se adaptan a la misma rutina. Se toca diana a las 8 y se ofrece un desayuno ligero. Después, se cierra hasta las 2 de la tarde. En este lapso de tiempo, como ya se comentó en el artículo anterior, Francisco se encarga del mantenimiento más básico. Por la tarde, tras de la cena, el comedor se reconvierte en sala de TV. No hay hora prefijada para apagar las luces de las casetas.
En principio, se trata de un lugar acotado, a salvo de miradas indiscretas. Sin entrar en detalles, las condiciones son mínimamente dignas. Cuenta con el valor añadido de las duchas. No obstante, el espacio en los módulos es bastante reducido, y es una incógnita si esto no degenerará en problemas de convivencia. Al igual que ocurrió al principio con la Sala Guadalquivir, se echa en falta un cartel que resuma las normas que deben observarse en el recinto.
Lástima que lo corto del presupuesto no permita realizar ningún trabajo específico con los usuarios.
Anoche aprovechamos la ruta de Solidarios para ver el refugio de verano en funcionamiento. Allí nos plantamos Diego, Manu, María C., Rosario, Valle, Virtu y servidor. Virtu contactó con Eva del CECOP y ésta, a su vez, nos presentó a Pepe, de la asociación APRONI (Pro Derechos del Niño) de Osuna, que ejerce como Coordinador del proyecto.
Pepe nos confirma que el recurso durará hasta finales de septiembre. En cuanto al personal que lo atiende, explicó que había "un monitor" que se turnaba con él mismo. Además, claro está, del empleado de seguridad. Nadie sabe nada acerca del comienzo de las obras en la edificación aneja.
Poco a poco, todos se adaptan a la misma rutina. Se toca diana a las 8 y se ofrece un desayuno ligero. Después, se cierra hasta las 2 de la tarde. En este lapso de tiempo, como ya se comentó en el artículo anterior, Francisco se encarga del mantenimiento más básico. Por la tarde, tras de la cena, el comedor se reconvierte en sala de TV. No hay hora prefijada para apagar las luces de las casetas.
En principio, se trata de un lugar acotado, a salvo de miradas indiscretas. Sin entrar en detalles, las condiciones son mínimamente dignas. Cuenta con el valor añadido de las duchas. No obstante, el espacio en los módulos es bastante reducido, y es una incógnita si esto no degenerará en problemas de convivencia. Al igual que ocurrió al principio con la Sala Guadalquivir, se echa en falta un cartel que resuma las normas que deben observarse en el recinto.
Lástima que lo corto del presupuesto no permita realizar ningún trabajo específico con los usuarios.
1 Comentarios:
Lo bueno de pertenecer a "Solidarios" es que conoces directamente una realidad que quieres cambiar. Lo bueno de estar en politica es que ves esa realidad la puedes cambiar.
http://www.upyd.es/web_medida/plantilla_general/secciones/plantilla.jsp?seccion=137¬icia=8788
Un saludo.
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